En Paracetamol seguimos confiandoComo somos gente de lo mas corriente, estamos con catarrazo. Yo estaba empezando a preocuparme por el hecho de acatarrarme cada vez que tenemos concierto, por aquello del miedo escénico y una posible somatización via - mocos. Pero viendo que a mi alrededor oigo mas estornudos que otra cosa, me quedo mas tranquila. In Paracetamol we trust, una vez más.
Aparte tengo un ataque de nostalgia tremendo. Pienso en cuando empecé a escuchar a Corcobado, con personas que ya no veo. A veces nos poníamos a escucharlo a oscuras y nos daba miedo, y alguien tenía que levantarse del sofá y quitar la cinta. También me acuerdo de la época en que Javier Corcobado y Mariola Fuentes cantaban todos los miércoles por la noche en el Morocco; el Parole, parole de Mina, Mi gran noche de Raphael o Sixteen tons de Laine Frankie. Yo iba con mis compañeros de teatro y siempre me encontraba con gente que luego ha acabado siendo fundamental en mi vida. El destino. O más noches locas en el Stella, cuando pinchaban él y Ana D. ¡Ah... inconsciencia! ¡Ah... juventud!
Total, que por una razón o por otra, voy todo el día con el kleenex, pero deseando que llegue mañana. Venid, va.
¶ 2:38 p. m.